Mueran de la envidia, parejas de superhéroes del mundo. He aquí la prueba de que Dios existe, y de que Kafkahuamilpa (también conocido como México) es de sus lugares preferidos para vacacionar. El cine de Neanderthal(Michel Caen dixit) tuvo en este par de regordetes estetas del pancracio a dos de sus más refulgentes astros. Como olvidar joyas del cine de aventuras estelarizadas hasta el punto del humor involuntario como la siguiente:

"La película da principio, como se temía, de manera realmente mítica. Cada uno de los personajes, aglutinadas presencias cinematográficas ya más allá del tiempo y la razón, pertenecientes al orden de la eternidad y a las pesadillas desmoralizadas del inconsciente colectivo, sale a escena, sube a un montículo en contraluz nocturno y, como si nadie lo hubiera reconocido, la imagen se congela y un letrero señala el nombre de cada invención original. Los monstruos son, por orden de resurrección, El Vampiro, muy rejuvenecido, con peinado in, orejas de alcatraz, y presto a volar dando saltitos para alcanzar los altos tejados desde los que debe brincar; el Hombre Lobo, quien, como ya usa barba y tiene cara del indio cacama, ha decidido no esperar lunas llenas y fue aceptada su solicitud para ser monstruo de tiempo completo; La Momia, que sometida a un régimen demasiado severo para adelgazar, en vez de dar terror, da lástima; Franquestain (sic) desgreñado y con un bigotito que realmente no le va, y finalmente, El Cíclope, recién inventado y ya estrella, que echa fuego como dragón desde su ojito porque estuvo congelado en un hielo de medio metro cuadrado, es plantígrado y está lleno de escamas de hule" Jorge Ayala Blanco, La búsqueda del cine mexicano, pp. 288-289.

¿Ya la reconocieron? Es la inefable Santo y Blue Demon vs. los Monstruos (Gilberto Martínez Solares, 1970) Las mañanas de mis sábados y domingos no son tales sin mi dosis matutina de incoherencia y ausencia total de lógica en un mundo en donde la única salida cuerda es un poco de locura.

Los libros y las películas deben ser emocionantes, faltos de lógica y de sentido común. Si quiero algo plano, aburrido y sin emociones, ya tengo mi propia vida.

¡Viva El Santo! ¡Viva Blue Demon!

Con Absolut, of course.